Aunque acababa de perder la segunda posición y de caerse del podio tras cuatro carreras consecutivas, Fernando Alonso no parecía haber perdido
la esperanza cuando afrontó a los medios de comunicación al final de la
carrera del Gran Premio de Bélgica, pero luego del fin de semana dejó entrever que con lo sucedido no queda más que trabajar desde ahora
para igualarlos en 2012, pues este año ya está muy complicado. "Hay un coche que es una bala, y los demás, que son coches normales. La
clave del Mundial es que ellos tienen un muy buen coche. Llevan doce
poles en doce carreras este años, que añadidos a cuatro del año pasado,
creo, son 16 seguidas", explicó tras el Gran Premio de Bélgica.
Alonso vislumbró un panorama ilusionante para lo que resta de
campeonato, después de haber realizado una buena salida y de haber
mantenido el ritmo de los Red Bull y de los McLaren mientras sus
neumáticos se lo permitieron. "Es evidente que en condiciones de
humedad, como las de Spa, estamos a dos segundos de Red Bull y vamos por
detrás incluso de McLaren. Pero también lo es que en seco podemos
mantener su ritmo y estar a muy pocas décimas de ellos y superar a
McLaren. Y que en según que condiciones muy favorables incluso les
podemos superar. Por tanto, tenemos un coche capaz de luchar por los
podios y por alguna victoria".
Lo que no escondió Alonso fue que cuando la pista es excesivamente fría,
cuando falta el calor, los Ferrari sufren mucho más de la cuenta. "Pude
mantenerme en las primeras posiciones gracias a la gran salida que
realicé. Pero después, con los neumáticos duros me estaban sacando 1,5
segundos por vuelta y no pude mantener mi posición.
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